Estás decidida a comerte el mundo de una vez por todas, de levantarte, subir la persiana, abrir la ventana, respirar bien hondo y decir, ¡BASTA!. Basta con la monotonía de todos los días, basta las malas costumbres, las malas caras, los tropiezos en suelo liso... Basta con los sueños imposibles, con los "no puedo", con lo inacabado.
¿Cómo que por qué? Fácil. Vas a ser capaz de salir ahí fuera y hacer lo que nunca nadie te vio capaz de hacer, lo que para ti creías que era imposible. Ya no habrá más días en los que estés apalancada en casa sin saber que hacer. Por fin podrás despertar y decirle a tu mamá con una amplia sonrisa "BUENOS DÍAS PRINCESA". Que ya nunca más te caerás, porque vas a tener cientos de manos bajo tuya, diciéndote "vamos, tú sí que puedes". Porque ya nunca tendrás ese miedo que te recorría antes por dentro, esa inseguridad que te echaba para atrás, esa mala corazonada que te hacía odiarte.. ya no existe nada de eso. ¿Y sabes por qué? Porque, para ti, ya no existen imposibles.
No hay comentarios:
Publicar un comentario